Colores de ámbar natural del Báltico

http://pl.wikipedia.org/wiki/Plik:Colours_of_Baltic_Amber.jpg

Aspecto
El ámbar es transparente a translúcido y tiene brillo graso. 

Su color es generalmente: 

• amarillo,  
• amarillo miel o  
• pardo, pero puede tener un tono  
• rojo o  
• blanco. 

Los tonos dorados más claros rigen la actividad mental, 
mientras que los más oscuros y rojizos regeneran la energía del kundalini,
produciendo centros de calor en las zonas frías del cuerpo y 
devuelven el pleno poder al plexo solar, chakra que está en relación directa con nuestra salud física y mental.

Propiedades físicas
La dureza del ámbar del Mar Báltico es entre 2½ -3 en la escala de Mohs.
Funde, o menor reblandece, iniciando su descomposición, a temperaturas relativamente bajas, situadas alrededor de 250ºC.
En contacto con una fina punta metálica al rojo vivo emite, al descomponerse, un humo aromático comparable al producido por la resina de los pinos actuales.

Sistema cristalino
Es un material no cristalizado.  

Cualidades de ámbar

El ámbar se compone de savias y de resinas variadas, provenientes de materias orgánicas vegetales mineralizadas y fosilizadas en las que a veces se incluyen insectos, helechos y flores. Las estructuras moleculares de estas inclusiones otorgan al ámbar aún más energía positiva. Esta cadena ininterrumpida de formas de vida prueba hasta qué punto es poderosa la naturaleza y cuan fuerte es su carga eléctrica.

• La alta frecuencia vibratoria del ámbar, limpia y purifica el organismo entero. 
• La irradiación magnética de la piedra es intensa y funciona como regulador de los sistemas endocrino y digestivo. 
• Contribuye a estabilizar el bazo y el corazón, y facilita la apertura del primer chakra (base de la espina dorsal).
• En Oriente los monjes recurren a él para ponerse en contacto con el rayo de la visión interior y acceder al estado de clarividencia.  

En el ámbar, que antiguamente fue una resina blanda y adhesiva, se pueden encontrar atrapados restos de animales, principalmente artrópodos (insectos, arácnidos y miriápodos). Entre estos restos de animales a veces son perfectamente reconocibles moscas (dípteros), avispas y hormigas (himenópteros). También se han visto cristales de pirita y de calcita.